Las fuerzas armadas francesas desplegadas en la región africana del Sahel mataron al jefe del grupo yihadista Estado Islámico en el Gran Sáhara (EIGS), Adnan Abu Walid al Sahraoui, buscado por Estados Unidos por ataques mortales contra sus soldados y trabajadores humanitarios extranjeros.
«Adnan Abu Walid al Sahraoui, jefe del grupo terrorista Estado Islámico en el Gran Sahara, fue neutralizado por las fuerzas francesas», anunció este jueves a la madrugada el presidente Emmanuel Macron.
«Se trata de un nuevo gran éxito en el combate contra los grupos terroristas en Sahel», agregó Macron en Twitter.
Walid al Sahraoui, exintegrante del Frente Polisario saharauí, fundó en 2015 el EIGS tras separarse del movimiento Al Qaeda del Magreb Islámico y jurar lealtad al grupo Estado Islámico (EI), que controlaba en ese momento franjas de Irak y Siria.
Este grupo yihadista fue señalado por Francia como «enemigo prioritario» en el Sahel.
Según la ministra francesa de Defensa, Florence Parly, el líder del EIGS, considerado responsable de la mayoría de ataques en Malí, Níger y Burkina Faso, «murió tras un ataque de la fuerza Barkhane», una operación antiyihadista desplegada por Francia en la extensa zona árida de la región del Sahel, informó la agencia de noticias AFP.
«Se trata de un golpe decisivo contra este grupo terrorista», señaló la ministra en Twitter.
«El ataque se llevó a cabo hace unas semanas y hoy estamos seguros de que fue el número uno del EIGS», explicó Parly a radio RFI, sin especificar el lugar.
Walid al Sahraoui era «el que estábamos buscando, ya que era el líder autoritario, indiscutible y sin rival» dentro del grupo yihadista, prosiguió.
«Cuando eliminas un eslabón clave de la cadena, interrumpes y debilitas a estos grupos terroristas», subrayó la ministra, que afirmó que el segundo y tercero al mando de EIGS habían sido «neutralizados» durante la primavera y el verano.
Walid al Sahraoui, que estuvo detrás del asesinato de trabajadores humanitarios franceses en 2020, también estaba siendo perseguido por Estados Unidos por una emboscada en octubre de 2017 en el suroeste de Níger, cerca de Malí, en la que fallecieron cuatro soldados de las fuerzas especiales estadounidenses y cuatro nigerianos.
Esta zona es escenario habitual de las acciones de dos grupos yihadistas: el Estado Islámico en el Gran Sáhara (EIGS) y el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes, vinculado a Al Qaeda.
El EIGS cometió ataques particularmente mortíferos contra civiles y militares en la conocida como «zona de las tres fronteras».