*Por Kelly Ferreyra

Desde que me acuerdo, con los años que escribo noticias, cada vida que se pierde en nuestra ciudad por un accidente de tránsito es un shock al corazón. Porque somos vecinos, conocidos, amigos, pero más duele la indiferencia, los insultos, los comentarios mal intencionados, como si fuéramos inmunes a que esto nos toque en algún momento.

Perder a un ser querido es lo más doloroso que hay, perder a un hijo ni quiero imaginar. Y cada vez que pasa, pienso en esa familia, ese papá esa mamá que están destrozados y sin consuelo.

De pronto recibís un video donde se ve a una persona tirada, había sufrido un accidente, lejos de publicarlo y compartirlo, inmediatamente comenzamos a buscar información. Las fuentes? La policía en primer lugar quienes inmediatamente informaron a LaVozDeCataratas.

Y los comentarios en las notas lo mataron de nuevo. Conclusiones, opiniones irrelevantes de personas que innecesariamente están esperando una desgracia para lanzar su veneno. Usted cree que está libre de una desgracia? Especialistas en todología se lanzan contra todo y con tanto odio. Pero saben qué?, detrás de cada vida que se pierde, hay una familia, una historia de vida.

Cuando llegó Roberto a casa y me dijo “Kelly era mi Catriel”, me vine abajo. Y estas cosas son personales y me las guardo para mí, porque trabajo para informar no para contar lo que siento como persona, pero cuando ya se pierde la sensibilidad y sobre todo el respeto hacia la gente que está sufriendo me puede más.

Cada persona que es buscada, es un calvario para nosotros que estamos de este lado, y cuando las encuentran sanas y salvas es un respiramos profundo, pero muchos  que están del otro lado, los destrozan. Cuando muere alguien en un accidente, dios mío, no se puede ser tan cruel. No tienen, familia? Hijos hermanas…

Catriel era muy pequeño cuando lo conocí creo que tenía 2 años, nunca supe que enfermedad lo aquejaba, nunca pregunté, porque se había curado. Hasta que a los 8 u 11 años sus padres me lo presentaron nuevamente, Catriel  el niño que gracias a un programa de radio lo pudieron tratar a tiempo y creció….

Un joven alegre, trabajador estudioso, lindo, feliz, que había cumplido 20 años en septiembre. Tenía toda una vida… Para los que lo conocieron sabían que le gustaba la gastronomía y se especializó en comida oriental, como chef de sushi y wok y era fantástico en eso. Pero también se juntaba con amigos a comer un delicioso reviro en cualquier parte.

Catriel ayudaba a mucha gente en las zonas alejadas del centro, llevándole comida a cualquier hora de la noche, lo importante era que comieran, y así hasta sushi invitaba a los chicos en el ex basural.

“Hace unas semanas el amigo de mi hijo se quedó en la calle, porque se le rompió la moto, en una esquina oscura, tenía miedo y llega un muchacho de la nada,  reparó la moto, la dejó andando y se fue…. Días más tarde cuando leyó la noticia y vio la fotografía recordó que ese chico que se detuvo a ayudarlo, era Catriel.

Testimonios como este, muchos. Formaba parte de la empresa familiar de fumigación y hacia todos los talleres y cursos de gastronomía que había. Trabajó en varias empresas conocidas de Iguazú y fue cadete del cuerpo voluntario de bomberos.. servir era su misión.

El rap otra de sus pasiones, y si un amigo le pedía “che hacele un rap a ese” el ahí ya lo estaba rapeando.. era muy capo de verdad.

Sin dudas queda el vacío, la tristeza, el dolor de su familia, su hermano, su mamá, su papá. Es mucho pedir respeto,  empatía?..

Cuantos jóvenes perdieron la vida, imprudentes o no, no está en nosotros juzgar y sacar conclusiones, porque no estábamos ahí para verlo. Catriel ya no está…  quiero que sepan quien eras, que hacías y como lo hacías, como te querían tus amigos y toda esa gente que te acompañó en el ultimo adiós…

Quizás estarás rapeando por allá arriba…

Catriel perdió la vida el jueves 30 de septiembre del 2021 en la Av Costanera Eduardo Arrabal.

*Kelly Ferreyra periodista

Directora de LaVozDeCataratas