El último domingo se conocía la muerte de forma violenta de una mujer de 41 años en la localidad de Wanda. Rápidamente la policía detuvo a dos sospechosos y para hoy se aguarda que declaren en indagatoria ante el juez Martín Brites.
El caso se investiga como un “homicidio” y según las pruebas iniciales recabadas el paraguayo de 84 años es el que al menos en principio tendría la situación procesal más complicada que el de 37. La víctima presentaba lesiones en la zona cervical y se presume que fue atacada a martillazos.
Virginia Riquelme tenía 41 años, era de Paraguay, pero no tenía documento argentino. Según las fuentes consultadas por este Diario, era conocida del hombre mayor y se investiga si tenían algún tipo de vínculo más allá de una amistad.
Respecto al otro sospechoso, se supo que habían tenido problemas personales anteriormente y hasta se habrían agredido mutuamente. Por eso se investigaba si podía haber participado del hecho. Lo cierto es que la mujer fue encontrada a unos 15 metros de la casa de uno de los hoy detenidos.
Cuando personal de la comisaría de Wanda obtuvo las primeros datos aprehendió a ambos pero era el hombre de 84 el que tenía presuntas manchas de sangre en un brazo y en el reloj que tenía puesto. Es por ello que es el principal sospechoso del hecho. Las pericias realizadas por Personal de Policía Científica confirmarán si se trata de restos hemáticos de la víctima.
Cabe destacar que les secuestraron las prendas de vestir a ambos, para verificar si también presentaban algún otro indicio del homicidio que se investiga. Una vez que el paraguayo designe abogado defensor, restará conocer si acepta declarar o si se abstiene ante el magistrado. La misma situación le cabe al otro sindicado conocido con el alias de “Pomelo”. Según los resultados periciales y las pruebas que analizará el magistrado, podría haber novedades respecto a su situación.
El caso se conoció alrededor de las 6.30 del domingo, cuando un peatón que caminaba por la calle Plusinski, del barrio Felipe II halló a la mujer tirada en la calle aparentemente sin signos vitales.
Avisó a la policía y confirmaron que estaba sin vida. Una vez allanada una de las viviendas, incautaron un martillo que por los signos que presentaba podría ser el mismo con el que fue atacada la mujer. Al respecto, su cuerpo fue sometido a autopsia en la Morge Judicial de Posadas para confirmar el tipo de lesión que acabó con su vida.