Tras ser sometido al control de alcoholemia, el conductor del Ford Ka arrojó un resultado positivo de 2,15 g/l, muy por encima del límite legal permitido. En consecuencia, fue detenido de inmediato por las autoridades.
Si bien no hubo que lamentar heridos, los daños materiales en ambos vehículos fueron importantes. Se labró un acta por infracción al tránsito y se procedió al secuestro del vehículo y la licencia de conducir del detenido.
El caso quedó a cargo del Juzgado de Paz local, que deberá determinar las sanciones correspondientes. Este lamentable episodio pone una vez más en evidencia los graves riesgos que implica conducir bajo los efectos del alcohol.
Fuente MOL