La mujer le había advertido que no la hiciera porque se lo permitiría. Paredes, desoyendo las palabras de Carmen, comenzó a realizar el trabajo; la mujer enojada, llamó a sus hijos, ambos se presentaron en el lugar y alli comenzó una trágica discusión.

Uno de los jóvenes identificado como Jonathan Ramos de 29 años atacó a la víctima empleando arma blanca del tipo cuchilla, mientras que Paredes intentó defenderse con un tronco, pero recibió varios cortes y puñaladas en los brazos, antebrazos y mano. Además de varios golpes en diferentes partes del cuerpo. Iván Ramos, el hermano menor de 26 años, en medio de la pelea extrajo un arma y le efectuó cuatro disparos; uno en el hombro izquierdo, dos en la espalda y el último en la nuca. Para los investigadores el último disparo tuvo el objetivo de «rematarlo en el piso».

Testigos del hecho relataron a los efectivos policiales que la madre de los asesinos, durante el conflicto, arengaba a sus hijos para que mataran a su ex.

Luego del crimen, los hermanos intentaron deshacerse de las armas, pero fueron localizadas por los investigadores. Los autores del hecho dieron un versión basada en la defensa de su madre ante un hombre que supuestamente la maltrataba, pero el titular de la UFI 1 de Morón, Dr. Filippini, presente en el lugar, ordenó la detención de ambos y también de la Sra. Carmen Ramírez, quienes quedaron a disposición de la justicia por el delito calificado, momentáneamente, como homicidio simple hasta que se compruebe la alevosía y se conozca el informe de la autopsia junto a otros trabajos científicos