Iguazú (LaVozDeCataratas) Hoy es el día del preceptor, y muchos no conocen la labor que llevan adelante estos docentes en una escuela y con los alumnos. “El preceptor es el pesado que persigue a sus alumnos para que estudien, para que rindan sus materias, exhorta y comunica”
Si hay alguien que sabe de reglamentación docente es ella, imposible discutirle porque lleva en su memoria todo lo legal: La reglamentación vigente de la función del preceptor es Interpretar fielmente y ejecutar sin demora las órdenes que recibiera de su Jefe inmediato o del Rector o Director. Guardar reserva sobre el trámite de asuntos a su cargo. Atender al público con urbanidad y brevedad. Conservar en buen estado sus útiles o implementos de trabajo. Todo escrito en el que intervenga llevará sus iniciales, siendo responsable, si por su negligencia diera lugar a una innecesaria o deficiente tramitación de los expedientes, o que se dictasen improcedentes o contrarias a los intereses del Estado. Desempeñar cualquier trabajo o función que le encomiende el Rector o Director. Observar disciplina en la oficina, manteniendo armonía con los demás empleados y ajustándose todos sus actos a las reglas de urbanidad. Guardar cuidadosamente, antes de retirarse, los expedientes y documentos a su cargo.
Pero para un preceptor esto va mucho más allá, “es orientarlos guiarlos y por sobre todo aprender de ellos, porque vaya que me enseñaron. Va más allá, que el mero cumplimiento administrativo. El preceptor es el nexo entre todos los actores de una Institución Escolar, es el puente que une a la familia con la Institución. El que detecta a simple vista las necesidades que te tienen sus alumnos con la sola expresión del rostro. Cumple la función en la mayoría de las veces, de tutor, mediador, enfermero, psicopedagogo…” dijo a LaVozDeCataratas
15 años de profesión:
“He sido preceptora de los primeros y segundo años, dónde los alumnos todavía tienen esa mezcla de sentimientos de dejar de lado la educación primaria e iniciar el tan ansiado por algunos de la secundaria. Dónde de un día para el otro dejar a sus queridas maes, para sentirse independientes. En mi labor diaria doy lo mejor de mí, como madre exigente que soy y a la vez protectora, para que sus inicios sean marcado por ese acompañamiento, soy mamá y papá muchas veces”
Mónica Ferreira estudió siendo ya madre, se puso al hombro la responsabilidad de sus cuatro hijos, su familia, y siguió adelante, y no existió ni sol, ni lluvia ni frio, menos el cansancio. Vendió de todo de hecho lo sigue haciendo para que el dinero alcanzara.
Sus hijos, su familia.
Una carrera con mucho trabajo:
Mónica Ferreira trabajó en el área administrativa en la Institución que la vio crecer, El Colegio San Francisco de San Pedro Misiones, con el correr de los años y por cuestiones de la vida volvió a vivir a Eldorado y a la escuela donde se recibió como preceptora, le abrió las puertas. “A lo largo de estos años me he ido capacitando en el área pedagógica y de gestión”.
Trabajó en el aula Satélite del Bachillerato Pedagógico N ° 4 que quedaba en Santiago de Liniers. En el año 2009 se cerró el aula Satélite y el Director por ese entonces crea el EPJA en 9 de julio y fue a dónde se trasladó con uno de sus cargos.
En el año 2015, solicitó su traslado a la escuela Normal Superior N ° 11 donde pudo concentrar sus dos cargos de preceptora ya titular. Desde el 2015 está en el cargo de secretaria, que es el escalafón más alto que puede llegar el preceptor y de preceptora turno tarde.
La pandemia:
Hoy con 48 años de edad le tocó hacer su tarea diaria online, pero ella ya estaba preparada. “Trabajar en tiempo de pandemia fue una experiencia que costó, ya que no todos mis alumnos contaban con un celular o con los medios necesarios para poder estar comunicados. Pero de igual manera generó vínculos con los padres y empatía con los alumnos y sus familias.
Pasar horas en tratar de comunicarte con un vecino aunque sea para poder saber el por qué, o cuál era la situación en la cual estaban los alumnos que no contestaban o no se acercaban a adquirir los cuadernillos para hacer sus tareas.
A los que nos gusta la tecnología, se nos hizo más fácil la carga de notas, confección de libretas virtuales, trabajar online, con los demás colegas y directivos. Pero complicado en algunos casos porque no podíamos tener comunicación fluida con los alumnos como cuando lo hacemos en la prespecialidad” relató.
Feliz día y nuestro reconocimiento a los preceptores!