Iguazú (LaVozDeCataratas) Sobre la planta de agua resaltó que «esta obra cambia también el eje de la toma del río Iguazú, al río Paraná que es un río mucho más estable en su volumen hídrico entonces va a generar otra dinámica».
También afirmó que se continúa trabajando en otras tomas como la del Río Iguazú «que será una toma mucho más moderna, con mayor flexibilidad para adaptarse a las características cambiantes que tiene el río en algunas épocas del año. También esperamos que para fines de octubre podamos llegar con la toma del agua del Arroyo Mbocaí para dar más tranquilidad a los vecinos».
Detalles de la Obra:
La misma, está compuesta por una nueva toma de agua sobre el Río Paraná, nueva impulsión de agua cruda, con caños de hierro dúctil de 700 mm de diámetro y 3,5 km de longitud; mas una planta potabilizadora con una capacidad de 400 m3 /hora (ampliable a 800 m3 /hora en una 2º etapa y 1.600 m3/hora en una 3º etapa).
Se trabaja para que este viernes se pueda poner en funcionamiento la planta y empiece a operar en modo de prueba hasta ser definitivamente entregada el día 11 de octubre al Instituto Misionero de Agua y Saneamiento (IMAS), organismo que estará a cargo de la operatividad de esta planta.
El monto de inversión actualizado es de 890 millones de pesos, fondos que dispuso el Gobierno Provincial de sus propias arcas financieras.
De acuerdo al informe técnico del área de Construcciones del Instituto, la premisa fundamental al diseñar la obra fue la de contemplar progresivas ampliaciones de su capacidad de abastecimiento, que comprendería -a futuro- agrandar la planta potabilizadora y sus correspondientes re potenciamientos de bombeo, como así también un sistema de captación de agua ubicado sobre un pontón flotante de 6,20 m por 9,00 m que permita operar independientemente de los niveles de fluctuación del Río Iguazú.
En una primera etapa, la planta tiene una capacidad de potabilizar 400 m3/hora lo que significará abastecer a 30.000 habitantes, con una dotación efectiva de 220 litros diarios por persona, lo cual equivale a proveer a 7.000 viviendas.
En la segunda etapa se produciría un incremento de 800 m3/hora de agua potabilizada y en una tercera etapa 1.600 m3/hora. Los referidos caudales permitirían el suministro a 60.000 habitantes (14.000 viviendas) y 120.000 habitantes (28.000 viviendas) respectivamente.