Iguazú (LaVozDeCataratas) Este lunes se presentó en la Escuela 615, el libro en papel «Padre Obispo: La Utopía Heredada» una obra colectiva en homenaje a Joaquín Piña Batllevell S.J., primer Obispo de la Diócesis de Iguazú. La recopilación había sido publicada de manera digital el 25 de mayo del año pasado y desde ahora ya se lo puede encontrar en formato papel.
El autor del libro es el periodista y escritor Claudio Salvador quien fue compañero y vocero de Piña y también el encargado de reunir los más de 30 testimonios que componen el libro, de personas que conocieron y convivieron con el padre Piña y acompañaron su lucha. Entre ellos 15 vecinos de Iguazú que hoy recibieron el ejemplar.
Además se preve que el propio Adolfo Pérez Esquivel, quien escribió el prólogo sea el encargado de entregar el libro a el Papa Francisco, quien fue uno de los Obispos, que apoyó a Piña durante la campaña contra la releección indefinida que pretendía aprobar Rovira para instalarse en el poder de la provincia.
«El libro es una obra colectiva que pretende rescatar memorias, testimonios, documentos históricos referidos a los 20 años que permanecio el Obispo Joaquín Piña, como Obispo de la Diócesis de Iguazú» explicó a LaVozDeCataratas, Claudio Salvador.
«Mi compromiso fue que ese libro no se va a vender, y en esta primera edición alcanza para poder llegar a las bibliotecas populares y públicas, escuelas y colegios que lo soliciten y poco a poco se lo vamos a hacer llegar» añadió.
La impresión fue posible gracias a la Fundación Obrar por parte de un colaborador que pidió no ser nombrado.
Consta de 220 ejemplares que pueden ser solicitados por escuelas y biblliotecas completando el siguiente formulario:
https://docs.google.com/…/1FAIpQLSfFWb4Vg62…/viewform…
Quienes deseen obtener el libro digital, en versión web y teléfono móvil, pueden solicitarlo a través de la página web www.herederosdelautopia.com.ar o al e-mail [email protected].
Joaquín Piña:
El obispo, español de nacimiento, se había ordenado sacerdote, jesuita, en Paraguay en 1961, y estuvo radicado en tierras guaraníes hasta 1986, oportunidad en la que el papa Juan Pablo II lo designó titular de la diócesis argentina de Puerto Iguazú, creada en ese mismo momento.
Desde su designación como obispo, Piña se distinguió dentro de la Conferencia Episcopal por su decidida posición en favor de los derechos humanos, su mirada crítica respecto de lo actuado por la institución eclesiástica durante la dictadura militar y su compromiso con los pobres, particularmente de las comunidades indígenas, de cuyos derechos fue permanente defensor.
En su actuación pública como obispo, Piña fue muy crítico con las políticas del presidente Carlos Menem y, en lo intraeclesial, un ferviente animador de las comunidades de base como forma organizativa de la Iglesia. También estuvo muy cerca de las corrientes más progresistas del catolicismo, incluyendo a la Teología de la Liberación.
Después de su renuncia al obispado por su edad avanzada, encabezó en el 2006 el Frente Unidos por la Dignidad (FUD) para derrotar al oficialismo misionero del gobernador Carlos Rovira y de esta manera impedir la reforma constitucional que habilitaría la reelección indefini
