Este lunes (3), la alcaldesa Lilian Ramos Narloch (PP) firmó un decreto de cierre de bares, restaurantes y servicios turísticos no esenciales en la isla. Entre las medidas se encuentra la suspensión de servicios como recorridos turísticos y atractivos artísticos.

Los taxis náuticos y embarcaciones de mayor tamaño, que ofrecen servicios de transporte al lugar, están autorizados a operar con restricciones: seguimiento de pasajeros mediante lista de embarque; disponibilidad de alcohol al 70%; uso obligatorio de máscara; y limitación de capacidad en un 70%.

El alcalde también decretó la prohibición del transporte de turistas y no residentes en la Comunidad Superagui, excepto en los casos de transporte de equipos médicos y apoyo sanitario. Según el documento, el funcionamiento de los hoteles, posadas y campings está suspendido hasta el 31 de enero, siendo los turistas que ya se alojan deben ser informados de la decisión, todos deben abandonar la isla dentro de las 72 horas, bajo pena de multas para los visitantes y para los establecimientos.

Fuente: Criss Losse Compartilha ,con información de Gazeta do Povo