Iguazú(LaVozdeCataratas) La ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzoti, habilitó la aplicación de la cuarta dosis de la vacuna contra el COVID-19 para los mayores de 50 y mayores de tres años innunodeprimidos que se hayan aplicado Sinopharm y personas que hayan recibido Sputnik y necesiten viajar al exterior, más precisamente a países que no incluyen a la Sputnik V entre las vacunas autorizadas debido a que no fue aprobada aún por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Estos últimos deben tener cumplir el intervalo mínimo (cuatro semanas), presentar pasaje y firmar un consentimiento informado.
La aplicación de la cuarta dosis está aún en discusión. El Gobierno oscila entre distintas posturas. La propia Vizzotti admitió en una entrevista radial que el ministerio que dirige “no recomienda” esta aplicación por lo que, aquellos que necesiten hacerlo para poder viajar al exterior, deberá firmar un consentimiento ante la posibilidad de que la dosis extra les genere una “hiporrespuesta”. La hiporrespuesta, según explicó, “puede ser generada por el sobreestímulo”.
Evidencia argentina
En tanto, esta semana fue publicado en la revista The Lancet Infectious Diseases un nuevo estudio realizado por científicos argentinos que confirma la necesidad de aplicarse la tercera dosis para combatir a la variante Ómicron, en la medida en que incrementa de manera significativa el nivel de anticuerpos neutralizantes.
Consultados sobre la cuarta dosis, los especialistas del CONICET al frente de esta investigación, Andrea Gamarnik y Jorge Geffner, resaltaron que hace falta disponer de más estudios para poder precisar cuánto tiempo perduran los anticuerpos generados por las vacunas.
En la actualidad, según la evidencia disponible, tras los seis meses se produce una caída en la capacidad neutralizante de las defensas contra Ómicron.
Fuente: Primera Edición