Iguazú (LaVozDeCataratas) Ese año, las calles se habían tapado de trabajadores fabriles, quienes reclamaban mejores condiciones laborales. Para esa época, los obreros tenían que dedicar entre 12 y 16 horas de su día al trabajo. Fue así como 80 mil trabajadores comenzaron una huelga contra los atropellos de los empleadores. El Gobierno norteamericano ya había promulgado una ley para reducir las jornadas laborales a 8 horas, pero los empresarios se negaban a respetarla.
“Un sueño no se hace realidad por arte de magia, necesita sudor, determinación y trabajo duro”, Colin Powell.
Feliz y merecido día para todos aquellos que trabajan y honran su labor diaria.