Iguazú (LaVozDeCataratas) Las actividades comenzarán esta tarde desde las 19:30 horas en la Parroquia Cristo Redentor, donde se realizará la bendición de un gigantografía y la ofrenda del libro Padre Obispo: La Utopía Heredada, una obra colectiva coordinada por el escritor Claudio Salvador, que reúne el testimonio de más de treinta y cinco personas que plasmaron en un texto los recuerdos de momentos y luchas compartidas con Don Joaquín.

«A aquellos que lo hemos conocido adentro de los templos y afuera de los templos, él nos enseñó que todos somos hijos de Dios. Siempre bregó por la verdad y la justicia y en todos los libros que escribió da ese testimonio. Quienes lo conocieron saben que tuvimos a un profeta, un hombre que no tenía miedo de decir la verdad y denunciar las injusticias , sea católico o no, admiró su obra y su proceder. Los que los hemos conocido tenemos la oligación de que su memoria se preserve» afirmó a LaVozDeCataratas, Laura Gimenez.

«Es triste porque acá en Iguazú, no hay ninguna calle que lleve su nombre, que lo recuerde» mencionó en ese sentido, a la vez que recordó algunos reclamos de su familia respecto a su sepultura: «Fue un Obispo siempre presente. No le gustaba que le digan Monseñor, nosotros le decíamos Padre Obispo y parece a propósito, que su lápida dice Exelentísimo Monseñor, y su familia pidió en una carta al Obispo anterior que se quitara eso de la lápida, pero hasta ahora no se hizo realidad. También decía que quería descansar en el santuario Santa María del Iguazú, pero está en la catedral».

Las actividades de memoria continuarán mañana sábado desde las 16 horas en la Capilla San José Carpintero del Barrio 1 de Mayo, donde se compartirá una merienda con los niños que allí asisten. Para la misma se reciben donaciones aún.

«La Capilla tiene un merendero que a partir de mañana se va a llamar Joaquín Piña. Es una alegría porque a ese lugar, en los lugares más humildes al Obispo le encantaba estar. Por eso siempre, en memoria de él llevamos la chocolatada.