Tarifas de luz, agua y gas: el Gobierno prevé anunciar aumentos y topes de consumo este jueves

Los usuarios que no se anotaron en el formulario para mantener los subsidios perderán ese aporte del Estado en forma gradual.

Luego de anunciar los cambios de funcionarios en la Secretaría de Energía, el Gobierno define el nuevo esquema de tarifas de gas, electricidad y agua: habrá tarifas segmentadas de acuerdo a los ingresos y topes al consumo para los que mantengan los subsidios. Según anticipó el ministro de Economía Sergio Massa en su cuenta de Twitter, el nuevo esquema será presentado el próximo jueves.

Con la salida de Darío Martínez como secretario y de Federico Basualdo como subsecretario, las nuevas autoridades serán Flavia Royón como secretaria de Energía, Federico Bernal como subsecretario de Hidrocarburos y Santiago Yanotti como subsecretario de Energía Eléctrica.

¿Qué se sabe hasta ahora del nuevo esquema de tarifas?

Los usuarios que no se anotaron en el formulario para mantener los subsidios perderán ese aporte del Estado en forma gradual. En el caso del gas, de acuerdo a la Resolución 610 de la Secretaría de Energía, publicada en el Boletín Oficial, los nuevos valores sin subsidio se aplicarán a partir del próximo mes de septiembre, a los usuarios de mayor poder adquisitivo y a los que no hayan completado sus datos el formulario para solicitar mantener los subsidios.

El primer aumento se aplicará a los consumos de gas por redes a partir del 31 de agosto. El segundo ajuste gradual, en tanto, se aplicará a los consumos realizados a partir del 31 de octubre y el tercer ajuste será a partir del 31 de diciembre

El primer aumento se aplicará a los consumos de gas por redes a partir del 31 de agosto. El segundo ajuste gradual, en tanto, se aplicará a los consumos realizados a partir del 31 de octubre y el tercer ajuste será a partir del 31 de diciembre.

Los valores detallados en la resolución corresponden al precio del gas natural en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST). Este es solo uno de los componentes del precio final de la factura que reciben los usuarios —representa cerca de un tercio del valor total— a lo que luego se suma el costo del transporte, la distribución y los impuestos y tasas de cada distrito.

El equipo de Energía: Flavia Royón, Federico Bernal y Santiago YanottiEl equipo de Energía: Flavia Royón, Federico Bernal y Santiago Yanotti

De acuerdo a los nuevos valores, los usuarios de la provincia de Tierra del Fuego tendrán a partir del 31 de agosto el precio de gas por metro cúbico más bajo, de $ 6,37; y los de la zona norte bonaerense el más alto, de $ 13,93; tras el primer ajuste. Estos valores aumentarán a $ 8,83 y $ 19,32 respectivamente con el segundo ajuste; y luego en noviembre volverán a subir a $ 12,25 y $ 26,79.

El precio del gas que se traslada a la tarifa y es facturado a los usuarios deriva directamente de la proporción que el Estado Nacional toma a su cargo del precio que perciben las empresas productoras de gas natural argentino, del costo del gas importado de Bolivia y del costo del GNL importado a través de barcos y regasificado. En la situación actual, sin quita de subsidios, en promedio el Estado Nacional asume a su cargo el 75,6% del costo del abastecimiento del gas que reciben los hogares.

Entre los más de 9 millones de hogares que pidieron mantener el subsidios al gas y la electricidad, el Gobierno va a aplicar topes a la tarifa subsidiada

En el caso del la subzona tarifaria Buenos Aires Norte, el precio del gas pasará de $10,05 por metro cúbico a $13,93 en el primer ajuste (un 38,6% más); luego a $19,32 (92,2% más) y finalmente a $26,79 en el último ajuste, donde se refleja el precio de la tarifa plena sin subsidios (166,5% más). De todos modos, estos porcentajes no son los aumentos finales que verán los usuarios en sus facturas, ya que el precio del gas en el ingreso al sistema de transporte es solo uno de los cuatro componentes de la tarifa total que deben abonar mensualmente.

Para el servicio de energía eléctrica aun no se publicaron los nuevos cuadros tarifarios sin subsidios. En el caso del servicios de agua que brinda la empresa Aysa, hubo un incremento de 20% a partir de julio y habrá un 10% acumulativo en octubre (una suba total del 32% para el 2022, por debajo del caso del gas y la electricidad). En septiembre se comenzará a aplicar la segmentación también para ese servicio, aunque no se definió si se usarán los mismos datos del formulario que se completó para los subsidios de gas y electricidad.

Topes a los consumos

Entre los más de 9 millones de hogares que pidieron mantener el subsidios al gas y la electricidad, el Gobierno va a aplicar topes a la tarifa subsidiada. “Vamos a promover el ahorro de consumo. Por economía de las cuentas públicas, por progresividad del sistema y por eficiencia en el uso de los recursos. No podemos seguir con un esquema en el que quien más gasta más subsidio se lleva”, dijo Massa en su primera conferencia de prensa como ministro de Economía.

En el caso de la energía eléctrica, se subsidiará hasta 400 kwh (por encima de ese nivel de consumo, se pagará la tarifa sin subsidio). Esto abarca al 80% de los usuarios, pero solo el 50% del consumo residencial, según detallaron desde el Gobierno. En el caso del gas, el tope aun no fue definido. Con todo, los topes serán distintos por regiones, donde se tendrán en cuenta las diferencias climáticas y el costo de distribución, así como también la estacionalidad.

Cuántos usuarios perderán los subsidios

El formulario para mantener los subsidios fue completado por los titulares de 9 millones de hogares. Del total, unos 400.000 no cumplieron con algunos de los requisitos para mantener el aporte estatal. Por otro lado, se estima que unos 4 millones de hogares no ingresaron sus datos, posiblemente porque excederían el nivel de ingresos para contar con la tarifa subsidiada.

De esa forma, de los 9 millones de usuarios que pidieron mantener los subsidios, cerca de 1,8 millones superan los consumos mensuales de 400 kwh y tendrán incrementos cuando pasen ese tope. Así se suman a los 4 millones que no pidieron subsidios y dan un total aproximado cercano a los 6 millones de hogares.

Fuente Infobae

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