El caso de un hombre que descubrió que no era el padre biológico de sus cinco hijos causó revuelo en Nigeria, reabriendo el debate sobre los altos índices de fraude de paternidad en el país africano.
La noticia fue compartida en Facebook por Henry Nwazuruahu Shield, ex asistente especial del gobernador del estado de Bauchi, al norte de Nigeria.
“El hombre tiene 57 años, hizo una prueba de ADN para todos sus 5 hijos y ninguno de los niños era suyo. Estuvo casado durante 20 años. Le están diciendo que ‘sea un hombre’. OK”, escribió Nwazuruahu Shield en la red social.
La publicación se volvió viral en poco tiempo, desatando todo tipo de comentarios.
“¿Qué lo impulsó a hacerse el ADN 20 años después del matrimonio? ¿No hay parecido con los niños? Tal vez tenía problemas de fertilidad. Bueno, puede engendrar hijos a los 57 años. Los otros niños no lo abandonarán”, escribió un usuario llamado Ezii Maya Ihemanma.
“Esto es desgarrador… Ha sido un padre responsable durante casi 20 años con 5 hijos. Él es el padre de esos niños, independientemente de quién sea su padre biológico. Ser padre es ser responsable”, dijo otro usuario llamado Bright Ifeanyi Uche.
“¿Quieres decir que obtuvo 0/5? Pero, ¿era impotente? Aunque la esposa descubriera su impotencia y decidiera seguirle el juego, ¿fue una buena decisión?”, especuló otro usuario llamado Emeka Liberty Nwoye.
FRAUDE DE PATERNIDAD
Más allá de las reacciones, el caso reabrió el debate sobre los supuestos altos índices de fraude de paternidad en Nigeria.
El fraude de paternidad ocurre cuando una madre deliberadamente identifica erróneamente a su pareja como el padre biológico de su hijo.
En los medios del país es frecuente leer historias similares a la que compartió Nwazuruahu Shield. Según estadísticas citadas a menudo en los últimos años, Nigeria sería el segundo país del mundo por fraude de paternidad en la población, con alrededor del 30% de casos (o 3 de cada 10 padres nigerianos).
“Nigeria ocupa un lugar destacado en el fraude de paternidad”, confirmó Abasi Ene-Obong, director ejecutivo y cofundador de Stack Diagnostics, una empresa de genómica, al medio nigeriano Pulse.
Sin embargo, el experto observó que “al igual que con la mayoría de las estadísticas basadas en la salud en Nigeria, se subestiman o se exageran porque el problema generalmente radica en cómo se recopila la muestra. Es posible que haya algún sesgo de muestreo en este 30 por ciento. Pero incluso para los sesgos de muestreo, ese número es bastante alto”, dijo.
El especialista explicó los altos índices de fraude de paternidad con el acceso limitado a pruebas de paternidad y su costo elevado.
Una prueba de paternidad en Diagnose Me, un proveedor de servicios genéticos y especializados en África, cuesta unos USD 220, informó Pulse. Con este costo, los hombres no necesariamente consideran realizar pruebas de paternidad para sus hijos hasta que surge la necesidad, normalmente por razones de salud o cuando existe una clara indicación o una fuerte sospecha de infidelidad.
El doctor Abiodun Salami, director médico jefe del Centro de ADN de Lagos, explicó en una entrevista con el medio Vanguard que los casos de fraude de paternidad se deben a que en Nigeria ”el sexo sin protección y las relaciones de múltiples parejas son algo común”.
“Otro problema es la mala planificación familiar. La mayoría de los embarazos primogénitos aún no son planeados”, dijo.
Según un informe global de planificación familiar de 2018 de la Conferencia Internacional sobre Planificación Familiar (ICFP), Nigeria registró más de 1,3 millones de embarazos no deseados. El informe halló que solo el 13,8% de las mujeres nigerianas usaron anticonceptivos.
Por eso, las mujeres son casi siempre culpabilizadas ante los casos de fraude de paternidad. Algo que, sin embargo, rechazan las feministas del país.
Una de ellas, Damilola Marcus, dijo que fenómeno se debe a una complejo conjunto de factores.
“Podría estar ligado a nuestra muy fuerte inclinación cultural hacia la reproducción y la longevidad del linaje. La expansión de la unidad familiar como requisito previo para la aceptación social puede ser una causa”, dijo a Pulse.
Según esta feminista, la penalización del aborto en Nigeria también es un factor adicional, sumado a la predisposición de las mujeres a proteger la reputación de los hombres, la ignorancia en los temas reproductivos y la estigmatización de la adopción en el país.
Es que, incluso con los avances en la ciencia médica, la sociedad africana patriarcal todavía considera un tabú hablar de esterilidad masculina, a la vez que las mujeres enfrentan una inmensa presión para quedar embarazadas.
“Básicamente”, concluyó Marcus, “tenemos mujeres que protegen la ‘masculinidad’ de su esposo al darle un hijo que no es suyo”.
Fuente Infobae