Este martes se podrá ver a simple vista un fenómeno astronómico que no ocurre desde hace 59 años: el mayor acercamiento de Júpiter a la Tierra.

Esto se debe a que las trayectorias de Júpiter, la Tierra y el Sol harán que los tres cuerpos celestes queden en una línea recta perfecta, en lo que en términos astronómicos se conoce como «oposición», como así también la llegada del perihelio para el planeta gigante, esto es, el punto de la distancia más cercano entre el Sol y otro cuerpo celeste.

Qué es el perihelio y cada cuánto ocurre

El perihelio es el punto más cercano de la órbita de un cuerpo celeste alrededor del Sol, siendo el de la Tierra constante y cada mes de enero.

En cambio, el de Júpiter es variable por la forma más pronunciada en su elipse orbital, en comparación con la órbita terrestre.

El próximo perihelio absoluto de Júpiter está contemplado para enero de 2023, pero la variación elíptica en la órbita de ese planeta trae consigo acercamientos cada vez más cercanos entre Júpiter y el Sol. Se calcula que Júpiter se acerca al Sol unos 740 millones de kilómetros cada doce años.

Qué es la oposición de planetas

La oposición de planetas ocurre cuando la Tierra se interpone entre el Sol y otro planeta y los tres objetos celestes quedan en línea recta.

De acuerdo a expertos astrónomos, este no es un fenómeno que suceda con cualquier planeta, sino que ocurre con los planetas externos. Según la NASA, los planetas exteriores son los gigantes gaseosos Júpiter y Saturno y los gigantes de hielo Urano y Neptuno. En este caso particular, ocurre cada 13 meses, lo que hace que el planeta parezca más grande y brillante que en cualquier otra época del año.

Acercamiento por dos fenómenos

La combinación de ambos fenómenos (oposición y efectos del próximo perihelio de Júpiter) traerá consigo resultados casi insólitos este 27 de septiembre. Entre otras cosas, los cursos orbitales de Júpiter y la Tierra ubicarán a éstos a la distancia más corta entre ambos en 59 años, calculada por los científicos en unos 591 millones de kilómetros.

Los astrónomos insisten en que esto no traerá consigo ningún efecto meteorológico para la población terrestre, y tampoco habrá caída de meteoritos. Sin embargo, sí implica una consecuencia claramente perceptible desde nuestro planeta.

Dado que Júpiter quedará a una distancia extraordinariamente corta de la Tierra, desde nuestro planeta será posible ver al lejano y enorme «vecino» (después de Marte) como un punto especialmente brillante en el cielo, justo después del crepúsculo. Y si el cielo está especialmente despejado, la extraordinaria brillantez de Júpiter podrá ser apreciada a simple vista, con una magnitud aparente de brillantez de -2,9 según los cálculos científicos. En comparación, la magnitud aparente de brillantez de la Luna en fase de luna llena es de -12,9.

Cómo y cuándo ver a Júpiter

No hay un horario exacto en el cual se pueda apreciar el planeta, sin embargo se podrá ver a simple vista tanto hoy  martes 27.

En este sentido, el astrofísico investigador del Marshall Space Flight Center de la NASA en Huntsville (Alabama), Adam Kobelski emitió un comunicado en el que explica que “con unos buenos binoculares, las bandas (al menos la banda central) y tres o cuatro de los satélites galileanos (sus lunas) deberían ser visibles».

En tanto, el investigador aseguró que hay que tener un buen trípode para conseguir una mejor visualización del planeta gaseoso: “una de las necesidades clave será una montura estable para cualquier sistema que utilice”.