En octubre pasado, durante una visita a Iguazú, el Gobernador se acercó al Misiones Gamer. Allí lo esperaba Franco Gallardo, un niño de 11 años con sueños robóticos y un prototipo entre manos que sorprendió al mandatario: un dispensador automático de comida para animales. En ese momento, Herrera Ahuad lo felicitó, compartió la historia en sus redes sociales y lo invitó a crear algo similar, pero con agua.
Un mes y medio después, en el Makerland realizado el fin de semana pasado en el Parque del Conocimiento de Posadas, Herrera Ahuad y Franco volvieron a encontrarse, pero esta vez con el prototipo del dosificador de agua listo y el «desafío» superado. Siguiendo la premisa de la política provincial de detectar y estimular el talento innovador, decidió concederle su deseo y reservarle un espacio para que el año próximo inicie sus estudios en la Escuela de Innovación en Posadas.