La policía de Salto Encantado acudió al barrio 1° de Mayo tras un llamado al 911 por parte de familiares de una menor de 17 años a quien encontraron en su vivienda inconsciente y con lesiones en el rostro. Tras las primeras atenciones en el hospital zonal, la adolescente manifestó que fue agredida por su expareja, quien tenía prohibición de acercamiento.
De acuerdo a su relato, el denunciado incumplió la medida judicial y le propinó golpes en el rostro hasta desmayarla. Ayer finalmente fue detenido cuando merodeaba la vivienda de la víctima.
El hecho, que preventivamente se investigaba como “lesiones y violencia familiar” pero que podría ser recaratulado como “intento de femicidio”, ocurrió el miércoles último alrededor de las 21 cuando la víctima estaba sola en su vivienda y fue abordada por sorpresa por su exnovio, un joven de 19 años, quien no podía acercarse a ese domicilio por una denuncia de “violencia familiar”.
Minutos después de oír una fuerte discusión, algunos testigos vieron salir corriendo al hombre y ante la llegada de un familiar de la mujer, le comunicaron lo ocurrido y en ese instante fue que descubrieron a la menor con lesiones en el rostro y desvanecida en el suelo de la sala de la vivienda.
Inmediatamente solicitaron asistencia a la policía y al servicio de emergencia para derivar a la víctima al hospital de Oberá. Allí se supo que presentaba contusiones varias, golpes en ambos ojos, en los pómulos y nariz. Desde el centro asistencial ratificaron a la policía que la joven llegó desmayada y se debía a fuertes golpes en la cara.
Con los primeros datos obtenidos por familiares de la joven, comenzaron a buscar a su expareja, un joven con residencia en la misma zona pero que tras el hecho se había fugado del barrio.
Con los primeros síntomas de recuperación de la víctima, investigadores de la Unidad Regional XI obtuvieron detalles y más datos sobre el presunto atacante pero recién ayer pocos minutos después de las 7, fue localizado y detenido por orden de la Justicia en turno en Oberá.
Se trata de un muchacho sobre quien recaía una medida judicial con prohibición de acercamiento para con su expareja, quien meses atrás había denunciado hechos de violencia que derivaron en una separación, que supuestamente el acusado no aceptaba y como seguía frecuentando la vivienda, solicitó una perimetral, notificación que se hizo reciente a las dos partes.
Lo atraparon en inmediaciones a una zona de malezas, distante a pocos metros del barrio y la vivienda en donde habría ocurrido el ataque, según explicaron desde la fuerza de seguridad.
Las mismas fuentes confirmaron que el sospechoso no se resistió y en principio había regresado al barrio con intensiones de saber sobre el estado de la joven ya que se presume que la golpeó tanto y una vez que la misma dejó de gritar y pedir ayuda porque se desvaneció, pudo haber pensado que la mató a golpes.
Respecto al estado de la mujer, lo último que se supo que se recuperaba de las lesiones sufridas y una vez dada de alta sería llevada a la comisaría local para radicar formalmente la denuncia.
“Asegurá bien las puertas”
Otra joven de 19 años denunció ser víctima de su expareja, pero esta vez en Concepción de la Sierra. Según argumentó en la Policía de esa localidad, un joven casi de su misma edad con quien tuvo hace un tiempo una relación de pareja pero que habría terminado por hechos violentos, la hostiga y persigue por todo el barrio y no la deja de frecuentar.
A tal punto que la mujer llegó a recibir varios mensajes intimidatorios por parte del sospechoso, quien aún no fue detenido, en los cuales le “recomendaba” que asegure bien las cerraduras de su casa al enterarse que tiene prohibición de acercamiento.
“No vas a vivir tranquila, asegurá bien las puertas”, fue uno de los mensajes y además se lo dijo últimamente cuando se cruzaron en la vía pública, siempre de acuerdo a los detalles brindados por la víctima en la ampliación de denuncia, que realizó el 2 de diciembre y ratificó ayer.