La situación con la covid-19 en China sería desesperante. El condicional es inevitable porque una de las fuentes de información que ofrece datos es la empresa inglesa Airfinity –consultora con perfil sanitario–, que no trabaja en el terreno y hace suposiciones a distancia. Según esta firma, el pico de muertes diarias podría alcanzar las 36.000 durante las vacaciones del Año Nuevo Lunar –21 al 27 de enero– que es la migración interna más masiva de la tierra con 2100 millones de viajes en más de un mes, cuando los chinos regresan al interior y al campo a visitar a la familia. Estos desplazamientos en verdad ya comenzaron el 7 de enero, propagando el virus a las áreas rurales.

Airfinity se atreve a hacer predicciones y dice que el pico de esta primera gran oleada de infecciones será entre el 13 y el 27 de enero con 4,8 millones por día. En un principio, esta consultora había vaticinado dos oleadas de contagios: en los días posteriores al período festivo una y otra en marzo. Pero ahora predice una sola ola de mayor intensidad alrededor de las fiestas. Esto implica «una mayor presión hospitalaria» y «un potencial aumento de la tasa de letalidad». El ajuste en los pronósticos se debió a que algunas provincias como Henan (centro), Gansu (oeste), Qinghai (oeste) o Yunnan (sur) «ya han pasado el pico de infecciones».

Algunas como la mencionada Henan o Hubei (centro) sufrirán un aumento de la demanda de camas de cuidados intensivos «hasta seis veces superior a la de su capacidad hospitalaria», declaró el director de Airfinity, Matt Linley. La empresa también corrigió al alza el dato de decesos acumulados desde el pasado 1 de diciembre: el cálculo previo arrojaba 437.000 fallecidos y el más reciente lo sitúa en 608.000.

Los datos oficiales:  La otra fuente de datos es la del Gobierno y esta semana hubo una gran novedad. La Comisión Nacional Sanitaria de China anunció el sábado un total de 59.938 muertes relacionadas con la covid entre el 8 de diciembre de 2022 y el 12 de enero de 2023. Según funcionarios de ese organismo, la edad media de los fallecidos fue de 80,3 años de edad. El 90 % tenían más de 65 años y más del 90 % sufrían enfermedades subyacentes. Y aclararon que realizan pruebas PCR para clasificar las muertes como relacionadas con la covid y que las causas de fallecimientos fueron fallos respiratorios (5.503) y enfermedades subyacentes que empeoran tras desarrollar covid (54.435).
El organismo aseguró que los casos graves de covid alcanzaron su pico el pasado 5 de enero, tres semanas después de que las autoridades relajaran la política de “cero covid”, alcanzando 128.000 casos graves.

Pero estos datos no parecen muy cercanos a la realidad, a juzgar por cómo se ha comportado el virus en el resto del mundo y en relación a la cantidad de población china, más el bajo nivel de vacunación con dosis que no son del tipo ARN mensajero, superiores a las vacunas creadas en China. Especialmente en los ancianos es baja la vacunación: millones la rechazan por creer en la medicina tradicional. Y se sentían protegidos por la política «covid-cero» –que fue muy efectiva–, la cual se levantó de repente por las protestas callejeras a fines de diciembre pasado.

Los datos de la academia:  Según un estudio de la Universidad de Beijing, unas 900 millones de personas –64 por ciento de la población china– se han contagiado desde comienzos de enero. En la provincia de Gansu se infectó el 91 por ciento de la población, seguida de las de Yunnan con un 84 por ciento y la de Qinghai con 80 por ciento. La investigación, dirigida por la académica Ma Jingjing del Instituto de Investigación sobre el Desarrollo Nacional de la Universidad de Beijing, agrega que el pico de contagios se produjo el pasado 20 de diciembre, unos 13 días después de que se relajaran las restricciones. No obstante, otros expertos chinos creen que el pico de casos continuará «hasta febrero o marzo», tal como vaticinó el exjefe de epidemiólogos del Centro de Control de Enfermedades de China, Zeng Guang.

La OMS reclama:  El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, aseguró la semana pasada que China no está dando cifras completas de fallecidos por covid, lo que impide saber el verdadero alcance de la enfermedad incluso a nivel global. Las dos fuentes informativas que sistematizan datos –-la consultura Airfinity y el Gobierno chino– difícilmente puedan ser muy exactas, por diferentes razones. Aunque por la información científica confirmada empíricamente sobre cómo se ha comportado el virus en el resto del mundo, es posible deducir estimaciones aproximadas para el país más poblado de la tierra. Pero números más certeros, quizá nunca se conocerán.

Fuente Pagina 12