Por el recrudecimiento de la violencia y el narcotráfico en Rosario, Córdoba reforzará los controles en el límite interprovincial por temor a que la saturación policial en Santa Fe provoque un “corrimiento” de las bandas. La zona de más riesgo es la que tiene eje en San Francisco, en el sudeste cordobés.
Desde fines del año pasado hay un convenio entre la Procuración General de la Nación y la fiscalía General de la Provincia para hacer investigaciones conjuntas entre fiscales provinciales y federales de Córdoba. El fiscal federal ante la Cámara de Apelaciones de esta provincia, Alberto Lozada, explicó que la clave es superponer la información y tratar de coordinar esfuerzos.
“Esto era una necesidad, sobre todo en provincias donde la persecución del narcomenudeo está a cargo de la Justicia provincial; es necesario tener esa coordinación”, dijo. Añadió que hay un “refuerzo de la seguridad en las ciudades fronterizas” por parte de la Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA), que depende de la fiscalía de la Provincia.
“Cuando las fuerzas federales refuercen la presencia en la provincia de Santa Fe, con particular énfasis en Rosario, es muy probable que acciones de narcotráfico se trasladen hacia otras provincias, Córdoba, entre ellas”, interpretó Lozada.
Juan Manuel Delgado, fiscal general provincial, señaló que es “difícil saber qué va a pasar”, pero que “se reforzaron las fronteras y se mantienen las acciones coordinadas de fiscales federales y provinciales e investigadores de ambas jurisdicciones”.
El despliegue más ordenado está a cargo de la FPA, encargada de la persecución del narcomenudeo, aunque no del narcotráfico, que se mantiene bajo la órbita federal.
La FPA destinó 80 efectivos para reforzar los puestos móviles del sudeste cordobés, región que tiene como punto neurálgico la ciudad de Marcos Juárez. Allí se instalará una sede de la Fuerza Provincial Antinarcotráfico, una vez que el Ministerio de Obras Públicas culmine la obra civil. El proyecto ya fue terminado, pero hay que esperar la licitación de la obra. La Fiscalía General pidió que la conclusión del edificio sea prioritaria. Por ahora, mantiene tres puestos móviles en la zona, además de los investigadores.
Ayer, dotaciones de la FPA, en colaboración con efectivos de Policía de Córdoba y de la Gendarmería Nacional, llevaron a cabo una serie de controles preventivos antinarcóticos en las ciudades de San Francisco, Jesús María y Colonia Caroya.
En la ciudad de San Francisco se patrullaron los barrios La Milka, Sarmiento, Parque y San Cayetano. A su vez, se estableció un control vehicular con la policía provincial en el cruce de la Avenida Bulevar Roque Sáenz Peña y la Ruta Interprovincial, que marca el límite con Santa Fe.
En San Francisco, Bernardo Alberione, fiscal de Delitos Complejos, enfatizó que “la realidad es diametralmente opuesta” entre Rosario y esa ciudad que limita con Frontera, Santa Fe. “La virulencia, la agresividad, cantidad de muertos y el temor social que hay ahora en Rosario son tremendos en comparación con lo que estamos viviendo en Córdoba”, dijo. Defendió el trabajo realizado en Córdoba para frenar el avance de bandas santafesinas.
“Es un tema que nos preocupó siempre, para bloquearles la posibilidad de ingreso y de instalarse en Morteros y San Francisco, por las conexiones directas con Rafaela y Santa Fe”, detalló. En una entrevista con El DoceTV reconoció, hace tiempo, que la banda liderada desde la cárcel por Evelio “Yiyo” Ramallo es una de las “observadas con especial atención” por sus movimientos en la zona de Morteros.
Yiyo Ramallo se ha convertido en el criminal más famoso y peligroso de Rafaela. Hace un año, la Justicia determinó que él –que ya cumple una condena de 23 años– y otros 10 integrantes de su banda quedaran presos preventivamente por formar parte de una asociación ilícita.