En las últimas horas, un hombre admitió haber matado a su hermano luego de una pelea durante una reunión familiar y confesó el crimen para no ir a juicio. Se trata de Adrián Benito Pereyra, quien asesinó a Raúl Osvaldo en el Paraje Chiquilihuin, cercano a la ciudad neuquina de Junín de Los Andes.
El domingo 21 de agosto de 2022, Día de la Niñez, la familia estaba reunida en una casa y los presentes tomaron varias bebidas alcohólicas. Cerca de las 20, hubo una discusión entre los tres hermanos Pereyra, la cual fue subiendo de tono hasta que empezaron a golpearse y arrojarse elementos contundentes.
Luego, sacaron armas blancas y comenzaron a atacarse mutuamente. La situación se salió tanto de control que un nene de 8 años, hijo de uno de los hermanos, terminó lastimado en un ojo y en ese momento se terminó la reunión.
El padre, Adrián Benito, al darse cuenta de que el responsable de la lesión había sido Raúl Osvaldo, fue hasta su casa y lo apuñaló en el abdomen con un cuchillo. La herida fue tan grave que le provocó la muerte.
En los días siguientes, el fiscal del caso, Manuel González, lo acusó como autor del delito de homicidio simple. En ese momento arrancó la investigación.
“No quiero ir a juicio”, dijo el acusado: En una audiencia que se realizó esta semana, el acusado manifestó: “No quiero ir a juicio”. De este modo, brindó su consentimiento para el acuerdo parcial al que llegaron su abogada defensora y el fiscal, y admitió su responsabilidad en el hecho.
Sin embargo, todavía no se llegó a un acuerdo respecto de la pena efectiva de prisión que deberá cumplir, por lo que la Oficina Judicial deberá fijar una próxima audiencia para que las partes debatan sus posturas sobre la cantidad de años.
Mientras tanto, el juez declaró la responsabilidad penal de Adrián Benito. Además, por pedido de la fiscalía bajo el argumento de riesgo de entorpecimiento, dictó que el imputado permanezca con prisión domiciliaria hasta fijar la pena.