El macabro hallazgo fue comunicado a las 13.15 horas por una médica del hospital local, quien acudió de inmediato a la comunidad mbya Ka’aguy Poty, ubicada en la ruta provincial 7. La doctora fue alertada sobre una joven de 20 años que había experimentado un parto prematuro, lo que desató la urgente respuesta médica.
Al llegar al lugar, los especialistas se encontraron con una escena desgarradora. El bebé, con tan solo 32 semanas de gestación y un peso de 1,300 kilogramos, presentaba una malformación facial y múltiples fracturas de cráneo. Las autoridades quedaron conmocionadas ante esta inquietante evidencia.
Ante este inquietante panorama, la comisaría Primera de Aristóbulo se hizo presente en la comunidad mbya para realizar las primeras indagaciones. La búsqueda de respuestas y el esclarecimiento del suceso han puesto en marcha un intenso operativo policial para resolver los detalles de este trágico acontecimiento.
La médica que atendió a la joven madre en el lugar reveló que no se encontraron indicios de maltrato y que la mujer no había reportado padecer dolores antes del parto. Sin embargo, el motivo detrás de las malformaciones y fracturas del bebé permanece como un enigma que la investigación busca desvelar.
A pesar del devastador desenlace, la salud de la joven madre fue prioridad. Fue trasladada al hospital local para recibir atención médica debido al sangrado propio del parto. Además, se someterá a diversos estudios para evitar posibles complicaciones y garantizar su bienestar.
La comunidad local, la Policía de Misiones y la Justicia esperan obtener respuestas que arrojen luz sobre esta tragedia que ha conmovido a todos los presentes.
Fuente MOL