En la represión de embarcaciones irregulares en el río Paraná, en Foz do Iguaçu, la Policía Federal (PF) de Brasil y la Marina de Paraguay lanzaron una operación conjunta el sábado 29. El objetivo era frenar los asaltos en aguas fronterizas.
La acción atacó la estructura logística de las pandillas que han estado llevando a cabo ataques contra pescadores locales y turistas deportivos, dijo la PF. Las víctimas son personas que frecuentan el lecho de Paranazão.
Según el balance de la corporación, «diez embarcaciones fueron incautadas sin documentación ni registro obligatorio». Estas embarcaciones, hechas de madera y aluminio, fueron confiscadas en ambas orillas del río, en territorios brasileños y paraguayos.
La Policía Federal destacó que los acercamientos se intensificarán en las próximas semanas. La «intención es inhibir las actividades criminales que ocurren en la frontera fluvial entre Brasil y Paraguay, especialmente los asaltos con el uso de violencia y armas de fuego», dijo.
La agencia de la policía federal destacó la importancia de la información de la comunidad que puede ayudar a las fuerzas de seguridad en este enfrentamiento. Pueden ser enviados a la línea directa, a través del anonimato garantizado.