Para combatir avispa barrenadora de los pinos, Sirex noctilio, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) Montecarlo cría nematodos que disponen de un biocontrolador. En Argentina, es el único laboratorio que produce y comercializa las dosis de este controlador biológico, según las demandas de los productores forestales.
La técnica del uso de nematodos para el control biológico de la avispa fue desarrollada por científicos australianos. Luego, se importó a Sudamérica y se adaptó a la región.
Tanto la tecnología como las cepas iniciales para la cría de los nematodos fueron cedidas desde EMBRAPA (Brasil), por medio de los convenios entre ambas entidades. Las dosis obtenidas consisten en una solución de 20 ml de agua que contienen un millón de nematodos en suspensión, que alcanzan para tratar una media de diez árboles afectados por el insecto.
La avispa barrenadora de los pinos es un insecto que desarrolla su ciclo de vida en el interior de los troncos de los árboles de la familia de las coníferas. Esta es una de las principales plagas de los pinos. Está presente en todas las regiones con plantaciones comerciales en el país. En la actualidad, existe una superficie de 1,3 millones de hectáreas forestales, según datos oficiales de la Secretaría de Agricultura de la Nación.
Una solución: “Esta avispa coloca los huevos a través de la corteza de los árboles, lo que produce la muerte de los árboles y es considerada la principal plaga de los pinos adultos”, explicó Edgar Eskiviski, investigador del INTA Montecarlo.
“Estas avispas también introducen una sustancia tóxica y esporas de un hongo que se desarrolla en la madera y servirá de alimento a las larvas de la avispa que se crían en el tronco”, detalló.
El investigador indicó que el nematodo Deladenus siricidicola es de especial interés para el control biológico de la avispa Sirex. Es que “tiene la capacidad de ingresar al cuerpo del insecto durante su estado larval y provocará la esterilidad de las hembras cuando alcanzan el estado adulto”, agregó.
“Las hembras de la avispa afectada continúan su desarrollo, pero en lugar de colocar huevos viables diseminan huevos con el nematodo parásito. Es la forma en que el controlador biológico se establece en el ambiente”, explicó Eskiviski.
Procedimiento: Para la cría de los nemátodos, en el laboratorio se realiza el cultivo en cajas de Petri del nemátodo con su hongo simbionte. Se realiza en condiciones controladas de temperatura y humedad. La cría consta de dos etapas: una de mantenimiento de las cepas de cría en agar y otra de cría masal para la producción de las dosis del biocontrolador.
“En la cría masal se utilizan frascos que contienen trigo esterilizado, donde el medio de cría que contiene los nematodos se desarrolla durante al menos 45 días desde donde es extraído para la obtención de las dosis”, explicó Eskiviski.
Para su aplicación, se recomienda que sea en el momento en que la avispa se encuentra en estado larval. Esto sería semanas antes de que entre en metamorfosis para transformarse en adulta. En el norte del país, se debe hacer durante los meses de otoño e invierno. Mientras que, en el sur del país, esto se da en los meses de primavera.
Las dosis de nematodos Deladenus siricidicola se comercializan en el INTA Montecarlo Misiones, a través de una unidad de negocios de INTEA. “Son producidas a pedido con una anterioridad de al menos dos meses de la fecha de utilización”, puntualizó el investigador.
Para finalizar, Eskiviski indicó que estas dosis de nematodos se utilizan en las distintas regiones forestales del país, como la Mesopotamia, Córdoba y Patagonia.