Los controles de velocidad móviles con radares de velocidad están suspendidos en el departamento de Alto Paraná, Paraguay. Además, tampoco habrá acercamientos de conductores en el tramo comprendido entre el Puente de la Amistad y el kilómetro 4, debido a las quejas recibidas de la población.

La medida es una respuesta a las constantes quejas recibidas sobre el uso de estos equipos para extorsionar a los conductores.

El anuncio fue hecho por el nuevo gobernador César «Landy» Torres, luego de una reunión de trabajo que sostuvo con los jefes regionales de la Policía de Carreteras.

Según el gobernador, ya no habrá ningún tipo de control con las famosas «pistolas extorsionadoras», nombre con el que fueron bautizados estos equipos por los conductores.

Ahora, los controles sobre las rutas nacionales que atraviesan el departamento se realizarán exclusivamente en los puestos fijos, que son siete en el departamento.

«También hablamos de vehículos con placas extranjeras, como se sabe nuestra región es muy visitada, porque recibimos muchos turistas. No se abordarán. Ahora, si no están sin las luces, se llevará a cabo la orientación correspondiente», dijo Landy.

Además, determinó que las pruebas de alcoholemia continuarán realizándose solo por las noches y los fines de semana y en lugares estratégicos.