Iguazú (LaVozDeCataratas) En horas de la mañana de hoy, la comunidad educativa de la Escuela 837 del barrio San Lucas se vio sacudida por un lamentable suceso: un robo que dejó huellas de intrusión y desorden en las instalaciones.
Entre los objetos sustraídos se encuentran dos netbooks, herramientas esenciales para el desarrollo educativo, y un equipo de música, específicamente un parlante Bluetooth. Este acto vandálico no solo priva a la escuela de recursos valiosos, sino que también representa una afrenta a la labor educativa y al esfuerzo de una comunidad que lucha por brindar una educación de calidad.
Un docente expresó su tristeza, destacando la precariedad de recursos en la pequeña escuela. «Sí, muy triste porque nuestra escuela es pequeña y con pocos recursos, cuesta mucho todo», afirmó a La Voz de Cataratas.
El personal docente, los estudiantes y los padres de familia se ven afectados no solo por la pérdida material, sino también por el impacto emocional de este incidente. La escuela, que ya enfrenta desafíos financieros, se ve ahora obligada a sobreponerse a este acto delictivo.
Las autoridades competentes han sido notificadas, y se espera que se realicen las investigaciones correspondientes para identificar a los responsables y llevarlos ante la justicia. La solidaridad de la comunidad, tanto en términos de apoyo moral como de posibles donaciones para reponer lo sustraído, será crucial en estos momentos difíciles para la Escuela 837 del barrio San Lucas.