Agentes de la Policía Federal de Foz do Iguaçu salieron a las calles en la mañana del jueves 7 para dar inicio a la Operación «Polvo de Hierro». El objetivo era detener dos grupos criminales especializados en el tráfico internacional de drogas y armas.

La movilización reunió a 108 agentes federales para cumplir 35 órdenes de allanamiento e incautación y 13 órdenes de detención preventiva. Las órdenes judiciales se ejecutan en Foz do Iguaçu y en Cascavel (PR), Descalvado y Porto Ferreira (SP), Alfenas (MG) y Santo Ângelo y Vitória das Missões (RS).

Uno de los grupos investigados tenía su sede en el municipio de Iguazú y destinaba la mayor parte de la droga a los estados de São Paulo y Minas Gerais, según la Policía Federal (PF). También suministraba estupefacientes a la región nordeste del país.

El segundo núcleo objetivo de la Operación Polvo de Hierro también tenía su sede en Foz do Iguaçu, además de Cascavel y Santo Ângelo. El tráfico de drogas regaba en Rio Grande do Sul, especialmente en la región metropolitana de Porto Alegre, la capital de Rio Grande do Sul.

«Uno de los grupos controlaba cuatro empresas con notables operaciones comerciales e industriales en Foz do Iguaçu», dijo la PF. «Hay indicios de que fueron utilizados para la práctica del lavado de activos, así como para el movimiento de cantidades recibidas por la droga traficada», señala la corporación.

Drogas en Paraguay:  La investigación se inició con la incautación de cargamentos de estupefacientes y las detenciones en flagrante delito. Se trajeron marihuana, crack y cocaína de Paraguay, y durante las investigaciones se incautaron 20 toneladas de marihuana y 200 kilogramos de cocaína crack.

La PF estima que los dos grupos criminales están vinculados a al menos 17 incidentes de tráfico internacional de drogas. Todos los estupefacientes habrían sido internalizados clandestinamente desde el país vecino.

Algunos de estos sucesos explicaron:

• 15 personas detenidas en flagrante delito;
• 20 toneladas de marihuana y 200 kilogramos de crack retirados de la circulación;
• Incautación de 6 vehículos de pasajeros y 10 camiones utilizados para el transporte de estupefacientes, la mayoría de ellos producto de delitos de hurto o hurto y con manipulación de chasis y placas (vehículos «clonados»).

Los principales sospechosos fueron detenidos. Y «a los investigados y a empresas a su nombre se les incautó dinero, vehículos e inmuebles, bienes presuntamente obtenidos como resultado de prácticas delictivas o incluso utilizados para el tráfico de drogas», explica la PF.

El nombre de la operación, «Pó de Ferro», hace referencia al tráfico de cocaína y al campo de actividad de las empresas investigadas.