Iguazú (LaVozDeCataratas) Desde sus inicios el 18 de mayo de 1984, con la llegada del primer camión cisterna bajo la gestión del entonces Jefe del Cuerpo Activo, Luis Bogado, cuyo nombre lleva hoy el cuartel, los Bomberos Voluntarios de Iguazú han sido un pilar fundamental en la seguridad y asistencia de la ciudad.
El cuerpo activo cuenta con un grupo especial de rescate en altura y profundidades, conocido como GERSI (Grupo Especial de Rescate en Situaciones de Inmediato riesgo). Este grupo está altamente capacitado para realizar diversas actividades de rescate, enfocándose en salvar vidas humanas y animales en situaciones extremas. Su labor es crucial en operaciones que requieren habilidades y equipamientos especializados, como rescates en edificios altos, barrancos y espacios confinados.
Además, el cuartel mantiene una escuela de cadetes para jóvenes de entre 12 y 17 años, fomentando desde temprana edad la disciplina, el valor del servicio comunitario y las habilidades necesarias para ser bombero. Los cadetes participan activamente en capacitaciones constantes, asegurando la continuidad y evolución del cuerpo de bomberos con generaciones futuras preparadas y comprometidas.
La dedicación de los bomberos voluntarios no solo se manifiesta en su respuesta a emergencias, sino también en su compromiso con la formación y el desarrollo personal.
El aniversario de los Bomberos Voluntarios de Iguazú no solo celebra cuatro décadas de esfuerzo y valentía, sino también el espíritu de solidaridad y servicio que ha guiado a estos héroes anónimos desde el primer día. La comunidad de Iguazú se une en agradecimiento y reconocimiento a quienes, día tras día, están dispuestos a arriesgar sus vidas para proteger la de los demás.