En lo que va del 2024, los combustibles han registrado una suba superior al 85%, en el contexto de los ajustes aplicados por el gobierno de Javier Milei sobre el ICL, y las autorizaciones de subas otorgadas a las petroleras, que llevaban casi cuatro años con precios prácticamente congelados.
Con este nuevo incremento, el precio de la nafta súper de YPF, la empresa que lidera el mercado con cerca del 60% de participación, pasará de $941 a $1.021 por litro en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Sin embargo, en la provincia de Misiones, donde los precios ya habían superado los $1000 en el último ajuste, los valores serán aún más altos, impactando de manera significativa a los consumidores locales.
Este aumento representa un nuevo desafío para los argentinos, quienes deben enfrentar el continuo encarecimiento de los combustibles, un insumo esencial para la economía y la vida cotidiana.