Iguazú (LaVozDeCataratas) En términos generales, el objetivo es evaluar el proceso de regeneración forestal, comprender la diversidad de insectos, especialmente abejas, y sus especies vegetales asociadas, como fuente de recursos alimentarios, con el fin de comprender la estructura de la red de interacciones ecológicas. establecido entre estos dos grupos taxonómicos, así como identificar el estado de conservación de la fauna de avispas sociales, libélulas, mariposas, moscas y recolectores.
El proyecto también inventariará la biodiversidad de anfibios y reptiles, además de investigar el posible origen de los organismos que colonizaron el Refugio. También se pretende diagnosticar la riqueza, diversidad y abundancia de aves y analizar la comunidad de mamíferos, investigando su riqueza, abundancia, ocupación e interacciones con la comunidad vegetal, además de evaluar los impactos de las actividades humanas sobre estos grupos.
El último estudio en la RBSH se llevó a cabo en 1987, cuando se realizó un inventario de mamíferos y aves después de llenar el embalse. Algunos de los animales salvajes rescatados fueron enviados allí. Posteriormente, a petición de las universidades, se realizaron nuevas investigaciones en el lugar, pero de forma específica.
La encuesta inédita es una alianza con Itaipú Parquetec, con el apoyo de UTFPR Campus Santa Helena, Unila, IFPR Campus Curitiba, IFPR Campus Umuarama e IFSULDEMINAS Campus Inconfidentes.
Historia: En 1978, Itaipú Binacional autorizó a la Junta de Coordinación la creación de un refugio biológico en la futura Isla de Santa Helena, a formarse en la zona del embalse, pero recién en 1984 se creó oficialmente el Refugio, con una superficie de 1.482,05 Ja. Hasta entonces, la zona estaba ocupada por agricultores.
La política adoptada por Itaipú permitió que los actuales residentes permanecieran, incluso después de la expropiación. La fecha límite para abandonar la zona era noviembre de 1981. Sin embargo, para la isla Santa Helena este hecho chocaba con la urgencia de iniciar los trabajos de recuperación forestal, pues el espacio albergaría parte de la fauna rescatada en la operación Mymba Kuera (rescate de animales).
Como solución al impasse se realizó una compensación denominada costeo inventivo, referida a la paralización de las actividades agrícolas, realizando la contraparte del agricultor las plantaciones forestales y posteriores tratamientos culturales de la zona hasta su salida en noviembre de 1981.
La siembra en la zona se inició efectivamente a principios de la década de 1980, utilizando una metodología de parcelas monoespecíficas, utilizando un total de 46 especies de plantas, distribuidas en 200 manzanas. En los años siguientes se llevaron a cabo otras plantaciones de enriquecimiento en zonas de regeneración natural.
“Con el tiempo se ve la evolución del bosque en el Refugio. Lo que queremos ahora es entender cómo va este proceso de restauración. Las especies que serán estudiadas funcionan como indicadores de calidad; son herramientas esenciales”, explica Liziane Kadine Antunes de Moraes Pires, de la División de Áreas Protegidas, coordinadora de investigaciones del Eje de Biodiversidad del NIT II.