Iguazú (LaVozDeCataratas) El Gobierno prevé una depreciación del peso del 2% para diciembre mediante el esquema de crawling peg, lo que, sumado a un incremento en la cotización del barril de Brent (referente internacional para Argentina), impulsaría un ajuste en los precios de los combustibles, según fuentes del sector privado.

Este incremento llega en un mes históricamente más inflacionario, complicando las aspiraciones oficiales de reducir el costo de vida a niveles del 1% mensual. Además, se espera que la suba en combustibles se sume a ajustes en otros sectores regulados, como la energía, lo que pondrá mayor presión sobre los precios generales.

La venta de combustibles, en tanto, sigue mostrando dificultades para estabilizarse en un contexto de una economía que lucha por dejar atrás la recesión. En octubre, el despacho de gasoil cayó un 5,7% interanual, aunque registró un repunte del 9,4% respecto de septiembre. En el caso de las naftas, la baja interanual fue del 4,5%, pero logró un crecimiento del 11,8% comparado con el mes anterior.

Este ajuste podría impactar no solo en los precios al consumidor, sino también en el comportamiento de un mercado que, a pesar de los repuntes mensuales, todavía enfrenta la incertidumbre propia de un escenario económico en recuperación.