Iguazú (LaVozDeCataratas) Recientemente, un informe realizado por la consultora Opina Argentina reveló que casi el 60% de los argentinos asegura conocer a alguien con Trastorno del Espectro Autista (TEA), de los cuales un 77% señala que se trata de un familiar cercano. Sin embargo, pese a esta cercanía, la investigación expone una realidad preocupante: aunque un 74% de los encuestados afirma estar familiarizado con el TEA, solo el 40% posee un alto grado de comprensión sobre sus características y síntomas.
Estos datos reflejan cómo, a pesar de la creciente visibilidad del autismo en la sociedad, sigue existiendo una brecha entre la percepción y la verdadera comprensión de la condición. Muchas personas han escuchado hablar del autismo, pero desconocen sus necesidades específicas y las barreras que enfrentan quienes lo viven. A ello se suma la percepción generalizada de que la sociedad aún no está lo suficientemente informada sobre el tema. Según el informe, solo el 45% de los encuestados cree que una persona con TEA puede integrarse plenamente a la sociedad, lo que subraya las dificultades de inclusión que aún persisten.
Misiones incorpora terapias complementarias a la medicina tradicional, un enfoque que abarca prácticas como el reiki, musicoterapia, arteterapia y las constelaciones familiares, que demostraron ser de gran ayuda en los tratamientos de niños con TEA.
Además, la Ley XVII de Protección Integral de las Personas con Trastorno del Espectro Autista garantiza el acceso a diagnóstico, tratamiento y acompañamiento dentro del sistema de salud provincial, mejorando la inclusión social y laboral de las personas con TEA.
El autismo no es una condición nueva, pero su diagnóstico ha crecido exponencialmente en las últimas dos décadas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), uno de cada 100 niños tiene autismo. No obstante, estudios recientes indican que la prevalencia global ha aumentado, con 1 de cada 36 niños recibiendo un diagnóstico de TEA, lo que representa un incremento del 317% desde el año 2000. Este aumento se atribuye a mejoras en los diagnósticos y una mayor conciencia social, pero también pone de manifiesto la urgencia de fortalecer una red de apoyo integral para las personas con autismo y sus familias.
El Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo representa una oportunidad para transformar el conocimiento en acciones concretas. Es imperativo dejar de tratar al autismo como un tema periférico y abordarlo de manera estructural. Las campañas de sensibilización, la capacitación de profesionales y la mejora en los recursos y servicios públicos son pasos fundamentales para garantizar que las personas con TEA puedan vivir con dignidad, respeto y en igualdad de condiciones.
La verdadera inclusión comienza con el conocimiento y la acción conjunta de todos los sectores: desde el Estado, las organizaciones sociales y las comunidades, hasta cada individuo que forma parte de la sociedad. Comprender el autismo no solo beneficia a quienes lo viven, sino que enriquece a toda la sociedad, construyendo un mundo más empático y justo para todos.
Ver esta publicación en Instagram
Una publicación compartida de LaVozDeCataratas (@lavozdecataratasok)