Iguazú (LaVozDeCataratas) El trágico desenlace se produjo luego de tres días intensos de búsqueda, que incluyeron rastrillajes por tierra, agua y con drones, encabezados por efectivos de la Policía de Misiones, Bomberos Voluntarios, Prefectura y personal del Parque Nacional Iguazú. El cuerpo fue localizado aguas abajo, en la desembocadura del arroyo con el río Paraná.

Según se había informado, Romina Rojas, de 41 años, se encontraba nadando junto a su esposo y su hijo en una zona no habilitada del arroyo, cuando fue sorprendida por la fuerte corriente y no logró salir a la superficie. El lugar, conocido por ser de difícil acceso y presentar cauces profundos, es una zona peligrosa especialmente tras días de lluvias o crecidas.

Su esposo, Carlos Augusto Maciel Carrasco, de 43 años, relató que estaban disfrutando de un momento familiar cuando ocurrió la tragedia. A pesar de los intentos por rescatarla, Romina fue arrastrada rápidamente por la corriente.

 Desde las fuerzas de seguridad volvieron a insistir en la importancia de respetar los lugares habilitados para bañarse y evitar zonas de riesgo, especialmente en cursos de agua con corrientes impredecibles.

El Juzgado de Instrucción N.º 3 de Iguazú interviene en la causa.